Carta abierta desde Argentina
Respeto profundamente al pueblo Paraguayo y por ende al Sr Canciller Don Lara Castro, pero no puedo dejar de mencionar lo que me produce la falta de respuestas a nuestras solicitudes enviadas por los medios que habitualmente se consideran formales.
Hoy apelo a este medio, a todos los amigos que no conozco pero que intuyo como son por sus comentarios y reiterados apoyos y, hago públicos mis pensamientos, en contra de lo que se pueda pensar.
Ustedes saben que busco información sobre mi hermana, María Esther Lorusso Lämmle, desaparecida desde el 14 de mayo de 1976, aquí en Argentina, donde vivo. Puede que sea más justo decir secuestrada por las fuerzas armadas y luego desaparecida.
Ya pasaron casi treinta y seis años desde ese entonces, muchos años al principio de ilusiones y luego de resignación y dolor. Nadie nos decía nada, fueron inútiles los viajes a Bolivia, Perú, Venezuela y Paraguay para encontrarla, siempre atrás de algún comentario que quiero pensar como bien intencionado.
La vida, nuestra vida, ha sido difícil, al igual que la de todos los familiares de desaparecidos, pero necesitamos recuperarlos o recuperarnos y esta es la intención de nuestras cartas, no otra, no queremos más consideración que las que merecemos, no buscamos reparaciones, buscamos solo la verdad. Para que nuestros familiares descansen en paz y nosotros también poder hacerlo.
No conozco al Sr. Lara Castro, pero sé que siempre ha sido una persona sensible y comprometida con todas estas realidades que en nuestros países, nos tocaron vivir.
En el mes de noviembre del 2011, entregó personalmente mi hermana María Teresa una solicitud a la Embajada Paraguaya en la Argentina, relacionada con la posibilidad de que María Esther, haya sido, en algún momento, trasladada a ese país. Se desprende esto de que aparece en solicitudes de informes del ACNUR, cursados a la República del Paraguay en el año 1978, solicitando información sobre ella. Poseemos copias validadas por el Museo de la Memoria y refrendadas por su directora, la Sra. Rosa Paláu, que tales solicitudes son parte de los Archivos del Terror de vuestro país.
Hoy 3 de abril del 2012, aún no obtuvimos ninguna respuesta, ningún acuse de recibo, nada, nada de nada.
Creo que no es difícil entender lo que significa para nuestra familia insistir con la búsqueda luego que nos entregasen tal documentación, sentimos, en ese momento, que aparecía una señal que nos permitiría resolver muchas cosas. Pero no es así.
Seguramente la Cancillería tiene un montón de temas que atender y debe fijar prioridades, pero esta es nuestra prioridad, nos acompaña cada hora de cada día, abrimos los correos pensando que en cualquier momento nos dirán, están autorizados para revisar los archivos que tenemos en custodia, pero no sucede.
El Sr. Nemesio Barreto, persona en la que confiamos, nos informó ya hace varios meses, que obrarían en los archivos que se encuentran en la Cancillería, documentos que hablarían sobre nuestra hermana, uno de ellos también sería del ACNUR y tendría fecha de septiembre de 1979. Solo queremos tener copia del mismo, para intentar armar este rompecabezas que no podemos ni debemos dejar de lado.
Solicito entonces, públicamente, que se nos permita revisar tales archivos, como un acto de buena voluntad, como un acto de comprensión hacia nuestra angustia. Quiero abrir mi correo y que alguien me informe de que puedo viajar a Asunción y que contaré con el apoyo y la colaboración necesaria para buscarlos y encontrarlos y volver entonces a requerir ayuda a nuestra Embajada en el Paraguay para alojarme, como lo hicimos antes cuando validamos los otros documentos a los que me refería.
Puede que no sea la mejor forma de dirigirse a un Canciller o a una embajada pero realmente necesito, necesitamos, una respuesta.
Atentamente
Luis María Lorusso Lämmle
DNI 18.808.344