Un nuevo incidente de la prepotente y desubicada policía caminera del cura Fernando Lugo vino a sumarse al de la semana anterior que tuvo como víctima a Hortensia Morán, confirmando la naturaleza autoritaria y desfasada de la misma.
Según el diputado Elvis Balbuena, agentes de dicho cuerpo se sobrepasaron también con él sus atribuciones y quisieron cobrarle en ese momento la multa, pero él alegó no tener dinero consigo, por lo que pidió una boleta para posteriormente abonar el monto. “En ese momento me vinieron todos, me dijeron que tenía que dejar mi vehículo, ahí se produjo la discusión. Me rompieron el parabrisas y el espejo retrovisor. Esto es la ley de la jungla”, refirió.
Indicó que los agentes quisieron retener su vehículo, a lo que él respondió que estaba apurado ya que debía asistir a la sesión de la Cámara Baja. Balbuena dijo que siquiera tenía dinero para su pasaje en ómnibus.
Reconoció haber golpeado al inspector Carlos Ovelar y posteriormente expresó que demandará a los agentes ante la fiscalía por los cargos de “intento de secuestro de propiedad privada” e “invasión a la propiedad” ya que trataron de retener su camioneta, según él, en forma ilegal.
La semana anterior, Hortensia Morán también presentó una demanda por abuso de autoridad contra estos desubicados trogloditas. La constitución Nacional garantiza que los ciudadanos deben ser protegidos en su propiedad privada, y que pueden circular libremente por todo el territorio nacional, pero en Paraguay son comunes las barreras policiales impidiendo el paso de ciudadanos en las calles y rutas, rémoras del estado policíaco y dictatorial sufrido en décadas de auge neo nazi bajo el gobierno de Stroessner.
